Ficha técnica
Año: 2014
Duración: 165 min
País: EE.UU.
Director: Michael Bay
Reparto: Mark Wahlberg, Nicola Peltz, Jack Reynor, Stanley Tucci...
Género: Ciencia ficción. Acción.
El filme nos sitúa después de la última película, con los Autobots y los Decepticons desparecidos de la faz de la Tierra. Si bien, todo volverá a ponerse en marcha cuando un grupo de poderosos e ingeniosos hombres de negocios y científicos quieran aprender de los Transformers y fuerzan los límites de esa tecnología que creen poder controlar. Para entonces, una antigua y poderosa amenaza Transformer pone a la Tierra en peligro. (eCartelera)
Crítica personal
He aquí un gran fan de la saga Transformers. Porque sí, porque me encantan los efectos apabullantes, la acción demoledora y el ruido ensordecedor; sobre todo dentro de una sala de cine. Porque a veces viene bien eso de "abrir los ojos y apagar el cerebro". Pero todo tiene un límite, y es que esta cuarta parte es MALA. Lo siento, pero no hay otro adjetivo. ¿Pero todo todísimo es tan horrible? Por supuesto que no, así que vayamos por partes.
La trama nos sitúa en el planeta Tierra tiempo después de la última película. En un principio, no pinta mal. Pero cuando ves que el protagonista es un tío de cuarenta años y su hija rubia "despampanante" (inverosímil total, por otra parte), empiezas a oler el tufillo. Ah, y me dejaba el novio de la susodicha. Claro, porque sin una pareja adolescente, una película así carece de tirón. Bueno, y falta lo mejor. Ahora no sólo hay robots 'normales', por así decirlo... No, no. Ahora hay robots samuráis, robots dinosaurios y hasta algunos con cara de señor de anuncio de seguros. Así que mejor no busques el sentido a todo esto. Y te preguntarás "¿pero al menos es entretenida, no?". Pues en sus dos horas y cuarenta y cinco minutos tenemos un poco de todo. Hay momentos entretenidillos y hay otros en los que te dan ganas de avanzar la cinta, hablando en vintage. Y eso es algo que Transformers no se puede permitir. Es de lo poco interesante que se puede sacar de estas películas. Si ya aburre, apaga y vámonos.
En cuanto a las interpretaciones... digámoslo finamente: no hay por dónde cogerlas. Al nivel del guion, más o menos. De hecho, me llama la atención que Mark Wahlberg, después de criticar tan duramente otra película en la que fue el protagonista: El Incidente, se haya prestado a participar en un filme considerablemente peor. ¿Qué pasa Markito? ¿La oferta de Bay era irrechazable? Debía de ser eso. De todas formas, si hay algo por lo que pueda merecer la pena perder 165 minutos de tu vida con esta película, son los efectos especiales. Espectaculares, al igual que en las demás entregas de la saga. Los efectos visuales y sonoros te meten en la película (hacen lo que pueden) y consiguen, tal vez, disminuir algo el mal sabor de boca general del largometraje. Tenemos, posiblemente, nominada al Óscar pese a ser la peor de la saga (y ya era difícil superar la segunda).
Si después de todo esto sigues con ganas de verla (yo seguiría, francamente, soy así de terco), prepara un bol de palomitas de metro y medio, una pantalla FullHD bien grande y el Dolby Sorround 7.1.
Los necesitarás.
- Nota Filmaffinity: 4.7
- Nota IMDb: 6.1
- Nota personal: 4